Orozco

Jamás pensé que cuatro años después de perderte,  aún yo pudiera sentir esto por ti.

Pensé que después de gastar todas mis lágrimas ese año,  en el que por cosas del cielo, tú y yo tomábamos caminos diferentes, yo no volvería a sentir este nudo en mi pecho otra vez y menos que fueses tú el causante de ello.

En esa ocasión, en la que nuestros destinos se separaron, yo decidí guardar todos mis anhelos y esperanzas que me hablaban de  ti y tú te llevaste los recuerdos que teníamos de los dos, o eso creo.

Yo sentí morirme aquel mes de Enero sabías? No encontraba forma alguna de seguir con mi vida. Aunque suene dramático y un poco estúpido, pues es cierto que nadie muere por amor, (bueno, después de Jesús, nadie mas.)

Sabía que tenía las herramientas para superar ese nuevo reto, pero el shock provocado por el momento no me dejaba ver mi vida mas allá de ti. Esos primeros días sin ti, fueron una batalla sin nunca acabar. A pesar de que en muchas ocasiones he dicho que soy débil, en el fondo soy consciente que es una gran mentira, en realidad soy fuerte, mas fuerte de lo que muchos  pueden imaginar,  pero, muy  cobarde para afrontar cambios grandes ( La valentía y la fuerza no siempre van de la mano) y ese  era mi caso, ya no  te tenía para sentirme segura, ya no tenía a quien corría a socorrerme con el primero de mis gritos.

Ya no tenía esos bonitos ojos cafés que me hacían perderme en lo profundo de tu mirada cuando la luz del sol iluminaban tus pupilas.

Recuerdas lo mucho que me gustan los días nublados, por encima de los soleados?

Pues, hoy es un día de esos y mi corazón se siente igual que el clima, todo a mi alrededor es gris y frío y no es justo conmigo misma que despues de tanto tiempo yo vuelva a tocar la herida y siga abierta.

No te estoy culpando, en verdad tú no tienes la culpa de nada, tu tenías que rehacer tu vida y eso es lo que has hecho, la culpa es mía por mantener por tanto tiempo la esperanza de que algún día Dios te pondría de nuevo en mi camino o que por otra lado, me guiara hacia alguien mejor que tú o por no saber con certeza que es lo que quería.

Te has dado cuenta de la cantidad de escritos que he hecho en tu nombre? Estoy segura que aunque no está explícito en el título,  has notado que hablo de ti.

Por muchos años, me preguntaba sí seguías visitando mi blog, si seguías pendiente de mi, si seguía siendo de interés para ti.

Después, me canse de tener el mismo estado todos los días y busqué la ayuda del único que podía librarme de semejante dolor, y aunque me pedía que te entregara por completo, me rehusé a dejar sobre él, todo tu recuerdo. Poco a poco fue convenciéndome que mi vida mejoraría sí prefería tenerlo a él en mi corazón y que fuese él quién ocupara el lugar que equivocadamente te había dado a ti. y así hice.

Tu nombre no se me olvido, pero sí se desvaneció en mi corazón por mucho tiempo, no volví a tocar la herida, por el contrario, dejé que él intentara sanarla con lo que pudiera, dijo que lo haría con amor y la verdad no le creí, ¿ Acaso no fue amor lo que te di y termine con mi corazón destrozado? como podría el pegar de nuevo los pedazos con amor? la verdad no le puse mucha fe a que pudiera lograrlo, pero no tenía más para perder así que dejé que hiciera lo que prometió, así, pasó el tiempo y volví a ver dibujada por momentos, mi sonrisa, esa que tanto me pediste nunca borrar de mi rostro y que precisamente tu, arrancaste.

y comprobé que podría vivir sin mis ojos rojos y mi voz entrecortada, y sin el vacío en mi pecho,  podía vivir si soltaba el peso que me mantenía en el fondo.

Durante todo este tiempo  he aprendido a confiar en el que me ama por encima de todo, y aunque en ocasiones mi infidelidad le ha dado motivos suficientes para apartarse de mi lado, sigue aquí, incluso está a mi lado mientras te escribo esta carta, creo que el está de acuerdo con que esto podría ayudarme a dejar por completo mi pasado atrás, como tu lo has hecho también.

Por ende,  hoy decidí escribirte por última vez, luego de tocar mi herida, y percatarme de lo que sucedía en mí, preferí hacer esto por última vez y de una vez por todas.

Creo que al hacer esto, podre sacar desde lo más profundo, lo que aun siento y que es la razón de que tu sigas  latiendo dentro de mi.

Algunas noches siento tus labios tocar los míos,  en ocasiones cuando estoy sola extraño las horas que pasábamos abrazados, las veces que pasábamos tanto tiempo en el teléfono y aun me da risa cuando me acuerdo que en tu casa tuvieron que cancelar la linea del teléfono o no podrían seguir pagandola, no olvido tu imagen en los atardeceres del Corralito de Piedra, después de tanto tiempo he vuelto a caminar sobre los pasos que un tiempo caminamos agarrados de la mano con el mundo bajo nuestros pies.

Luego me reprendo por hacerlo, no se trata de negarme a recordarte de una buena manera, es que , si lo hago, me toca abrirle la puerta a la tristeza por no poder seguir escribiendo la historia contigo como el protagonista. y por no tener todavía quien te reemplace en el guión.

Me pregunto si soy yo quien no le ha dado el aval a ninguno de los chicos que por estos cuatro años han hecho fila para ganarse el papel, o son ellos que a a pesar de sus méritos, no han cumplido con los requisitos?

la idea de creer que esperabas por mí quizá alentaba a mi "sassy"  corazón a mantenerse firme; Hasta que te vi con ella,  y allí me golpee de frente con la realidad.

Que hermosa es ella, nunca he dudado de tu buen gusto. y bueno, esa imagen se convirtió en el detonante de esta bomba que hoy me deja ver que no te habías desvanecido por completo.

Y ahora me pregunto si todo esto es por que aún siento algo por ti o solo son mis celos los que no me dejan ver con claridad  que por siempre mi mayor interés fue que tu fuese feliz, conmigo o sin mi.

¿Qué es lo que me molestas? Que tu tengas a alguien a quien amar o que yo aun no tenga... a nadie?

Creo que esa era la pregunta que Calaba hondo en mi corazón  y que ahora siento desinflado.

Discúlpame, si te hace sentir mal lo que lees. por favor, no tengas pena de mi ni te compadezcas, esto es solo un ejercicio para avanzar en mi vida.

Yo sabía que así iba a terminar todo esto, en un escrito con tu nombre y tu sello, quemándose en mi realidad emotiva.

Solo así volvería a escribirte.

Hasta aquí llegó el tren de mi vida contigo. Hoy, soy yo quién te solicita que bajes en esta parada, llegó el momento que alguien más ocupe el puesto de al lado, sin que tu recuerdo sea un obstáculo.

Quizá algún día leas esto, quizá nunca lo hagas, quizá intentes llamarme después para aclarar algunos puntos, esperaré la llamada, a pesar de saber, que cuando lo hagas, yo no tendré palabras para responderte.

Buen viaje y buen viento Emiliano. Que sea Dios llevándote más  y más lejos y tu hermosa esposa e hijos, tu ministerio y tus sueños, sigan siendo parte de las añadiduras.

Por fin puedo decirte ADIÓS mi Spacial.

Sin resentimiento, solo te pido que disfrutes de la vida  con el buen recuerdo que mientras pude, yo te amé.