Culpable sin saberlo.

Son casi las 03:15 am y aún no puedo dormir, sigues aquí, en verdad lo estás y no sólo en mi pensamiento.

Cada palabra que escribo, cada lírica que leo me impide hacerlo. Cierro los ojos y siento tu presencia aquí, junto a mi, ocupas mucho espacio en mi cama, no niego, me mantiene caliente en las noches, pero, no debes estar aquí, este no es tu lugar, esta mal pensarte de esta manera. Hasta hoy habías sido sólo mi amigo, así te había visto todo este tiempo, los kilómetros que  nos separan habían sido mi colchón, mi intención en todo este tiempo fue mantener la postura, pero decidiste escribirme y entre todas tus bonitas palabras no pude evitar  sorprenderme al saber que haces lo mismo que yo; enfatizando me escribías que  abrazas la almohada muy fuerte y te convences que es mi cuerpo tibio el que  retienes entre tus brazos y así pasas las noches, sólo eso logra calmar tu ansiedad y tu soledad.

Ahora entiendo la humedad en mis cobijas, no eran sólo mis sueños desháciendose en la madrugada, mis hombros húmedos recibian tus lágrimas derramadas por el dolor acumulado, además de las palabras que nunca se dijeron. 

Sin embargo, la distancia no me impidió sentir tu roce, sí, te sentí, sentí tus caricias, a mi también me avivaron. ¿Puedes sentir como se eriza mi piel cuando recibo tu respiración en mi cuello? Me haces temblar cuando cantas con tu rostro incrustado en mi.

No supe que decir al saber esto, no estaba preparada para ser testigo de como inmovilizas todo mi ser con sólo un par de letras y un mundo de sentimientos.

Doy vueltas y vueltas en mi cama. Enmarañando mis sábanas entre mis piernas, con tu nombre tatuado en cada rincón de mi y me pregunto si estarás dormido mi amor, me pregunto si estarás soñando conmigo. 

Acaso esto nació de la noche a la mañana?  Como no me di cuenta que no le prestaba tanta atención a tus bonitos ojos verdes sólo por las líneas claras en tus pupilas.

¿Por qué tus palabras han tumbado todos mis muros? ¿Como hallaste el punto débil? Si me tomé el trabajo de reforzarlo con actuaciones frías y palabras de cajón, esas que las amigas le dicen a sus amigos, no había mucho que mirar y muy poco que notar.

Pero ahora me tienes aquí perdida en mi propio mundo. Las letras sólo flotan en mi cuarto, cada vez son más, ellas me asfixian. 

¿Por qué no te llevas tus palabras contigo? No se donde guardarlas, no sé como tenerlas.  

Pero a quien intento engañar? Desde el primer momento en que fueron leídas quedaron atadas a mi corazón, y me imaginé allí entre tus brazos, te imaginé jugando con mi cabello rizado,  como me hacías cosquillas cuando pasabas tu barba por mi espalda y yo trataba de no hacer ruidos para no despertar a los demás chicos.

No es fácil escabullirse en una trinchera llena de cuerpos ansiosos de ¿Violencia o Justicia? No lo se, pero ir directo a ti porque tu cuerpo sediento de mi me llamaba. Y no había otro lugar mejor para estar que en esa pequeña cama contigo, escondida en ti.

Dime si esto es correcto, dime por favor, si esto está mal. Dime que necesitas escuchar que te cante canciones de cuna para dormir. Dime que estas escuchando "la canción"y que me estas abrazando como yo lo estoy haciendo ahora, para poder dormir aqui sin ti.