Oye tú, si tú, el que esta ahí de
pie entre la multitud, viéndome de lejos, escondiendo la mirada ante mis ojos,
te he visto, he visto lo que haces, también me miras, pero disimulas, te he
visto, te he visto jugar con mi cabello, en el fondo te gusta mi expresión
tímida, he visto como te emocionas imaginándote esos paseos a solas cuando
agarras mi mano y me llevas a ese lugar nunca antes visitado por ti ni por mi,
a ese lugar donde solo los que dicen amar han llegado antes, a ese lugar
llamado Cielo; he visto como disfrutas conversar con mi silencio y como
entiendes mi lenguaje cargado de gestos rígidos y fríos.
No, no escondo mi mirada de ti, solo evito que adviertas cuando en el punto máximo de su expresión te revele lo que con palabras me ha costado decir, se que te has percatado del nervio hasta en mi caminar cuando a mi alrededor te encuentras, también he notado tu nerviosismo cuando estas cerca de mi, quizá yo influyo en ti, quizá te has enterado de lo que siento y no sabes como reaccionar, o quizá sientes exactamente lo mismo que yo.
Ya no creo ser tan invisible para ti, porque aunque trato de no estar mucho tiempo en tu rango de vista, es para mi inevitable buscar tu rostro antes de irme, y en muchas ocasiones nuestras miradas se han encontrado, como ahogando un adiós, o en un sentimiento reprimido escondemos las palabras "no te vayas", nuestras miradas son la que nos delatan, el uno al otro queda expuesto cuando por momentos mis ojos se deleitan en tu fisonomía y tu me cachas viendo idiotizada lo que solo en sueños he tocado.
Oye tú, si tú, tú me has hecho esto, me tienes en este lugar presa de mis pensamientos, me tienes encerrada en esta celda junto a mis sentimientos y mis miedos Y es que mis dedos se encuentran dormidos de tanto acariciar tu angelical rostro... en sueños, Si, solo en sueños, tengo la valentía de hablarte al oído y descargar en ti toda mi ansiedad; Tengo los labios hinchados de besar cada lunar de tu cuerpo, como disfruto dormir placida en tu pecho o peinar tus cabellos de ébano, que el viento desordena, quizá por celos, quizá solo para molestarme.
Oye tú, Si tú, cambia esa cara, tu rostro a tomado el color de tu camiseta al enterarte de lo que siento. Palideces con la verdad? Pero tu, y solo tu provocaste todo esto.
Oye tú, si tú, tú me has hecho esto, me tienes en este lugar presa de mis pensamientos, me tienes encerrada en esta celda junto a mis sentimientos y mis miedos Y es que mis dedos se encuentran dormidos de tanto acariciar tu angelical rostro... en sueños, Si, solo en sueños, tengo la valentía de hablarte al oído y descargar en ti toda mi ansiedad; Tengo los labios hinchados de besar cada lunar de tu cuerpo, como disfruto dormir placida en tu pecho o peinar tus cabellos de ébano, que el viento desordena, quizá por celos, quizá solo para molestarme.
Oye tú, Si tú, cambia esa cara, tu rostro a tomado el color de tu camiseta al enterarte de lo que siento. Palideces con la verdad? Pero tu, y solo tu provocaste todo esto.